Marzo fue tercer mes con menor producción de agua de últimos cuatro años

• Valle Central registró déficit de lluvias en 2018 de 23% y 2019 de 21%, según IMN, lo que provoca marcada disminución de los ríos captados por el AyA.

• Desde el 2017, Institución inyectó cerca de 820 litros por segundo adicionales gracias a 9 pozos nuevos y el apoyo del ICE desde el embalse de Orosi.

• Lluvias intermitentes son insuficientes para disminuir necesidad de racionamientos pues los ríos están muy reducidos.

• Programa de racionamientos para semana del 20 al 26 de abril con pocos ajustes.

Debido a la escasez de lluvias de los años 2018 y 2019, el mes de marzo de este año fue el tercero con menor producción de agua potable en el AyA de los últimos cuatro años, apenas alcanzó los 5.775 litros por segundo (l/s). Este déficit se mantiene a pesar de que la institución ha inyectado 9 nuevos pozos desde el 2017 para un total de 720 l/s adicionales.

En el Acueducto Metropolitano se producen entre 5.900 y 6.000 l/s en la época lluviosa, por lo que el déficit de este mes fue de 125 l/s, el consumo de 30.000 personas.

La explicación de este bajo registro en marzo se debe al déficit acumulado de lluvias que golpea directamente los ríos que se potabilizan en 19 plantas del AyA. De acuerdo con datos del Instituto Meteorológico Nacional (IMN), la disminución de lluvias en el Valle Central en el 2018 fue de 23% y en 2019 un 21%.

Esta baja, aunada a la creciente demanda de agua de la población por la época seca y las medidas de higiene frente al COVID-19, obligan a continuar los programas de racionamientos en el Área Metropolitana para distribuir el escaso recurso.

Para paliar esta situación, el AyA ha inyectado desde el 2017 un total de 12 pozos nuevos que suman un caudal de 720 l/s adicionales (ver recuadro: Aumento de caudales). Por ser fuentes subterráneas, los pozos resisten mejor el déficit de lluvias, pero son más costosos de operar.

Solo en marzo del 2020, la Institución consiguió aumentar en 320 l/s la producción gracias a 3 nuevos pozos y la coordinación con el Instituto Costarricense de Electricidad para aumentar el caudal proveniente desde el embalse El Llano en Orosi. Estos caudales se reflejan parcialmente en el dato de producción de marzo.

El AyA aclara que las lluvias pasajeras de inicio de abril no aumentan los caudales en los ríos que se aprovechan para consumo humano, por lo que el programa de racionamientos sigue siendo necesario para distribuir de manera equitativa el escaso líquido disponible. 

Uso responsable

Los esfuerzos por aumentar la disponibilidad de líquido deben ir acompañados de un compromiso de la ciudadanía por usar responsablemente el agua.

El consumo de agua promedio por persona en Costa Rica es de 324 litros por día y actualmente hasta 423 litros por la época seca y aparentemente la implementación del teletrabajo; la Organización Mundial de la Salud recomienda 100.

La institución hace un llamado a ser solidarios con el uso del agua, la estancia de las personas en sus hogares, dispara el consumo dado que se realizan labores domésticas de manera intensiva, como el lavado de ropa o de vehículos, lo que restringe el agua disponible para los demás. Este fenómeno provoca disminuciones de presión y hasta faltante de agua en ciertos sectores, principalmente en los poblados más altos del acueducto metropolitano. 

Racionamientos

Para distribuir de manera más equitativa el escaso líquido disponible, el AyA se ve obligado a continuar el programa de racionamientos en el Área Metropolitana.

En la semana del 20 al 26 de abril se registran pocos cambios respecto a los horarios vigentes, únicamente se amplía levemente la población de Moravia y San Pablo. El programa abarca a 322 850 personas de 15 cantones, se trata de Alajuelita (26.250), Curridabat (19.000), Desamparados (61.300), Escazú (21.400), Goicoechea (8.000), La Unión (20.000), Montes de Oca (3.000), Mora (6.500), Moravia (14.300), Puriscal (11.800), San José (47.500), San Pablo (27.500), Santa Ana (13.800), Tibás (26.000) y Vázquez de Coronado (16.500).